El otoño casi ha quedado atrás y se acercan las primeras heladas serias. La primavera, el verano y el otoño de este año son duros en el calendario... ¡y la mayor parte ha transcurrido de forma asombrosa! Un año especial, se puede decir con seguridad... Muchos lugares nuevos, emociones, impresiones, experiencias.....
Se acercan los finales... y quiero llevar conmigo al invierno todo el calor que he ganado durante este tiempo. El calor... que he echado de menos, que siempre pude compartir ilimitadamente, en algún lugar y por alguna razón perdido y en escasez crítica... ahora... ahora... estaba seguro de que este es mi estado permanente.
La energía es una fuente de calor... pero sólo de calor físico, y ahí es donde el ejercicio resulta útil. ¿Dónde está la fuente de calor mental? ¿Cómo lo mantenemos? Tal vez haya un punto débil por donde se escapa ese calor. Tendré que buscarlo.