... pero todo está en las pequeñas cosas. Tú y yo siempre vemos el panorama general... desde afuera... desde lejos. Cualquier imagen se compone de puntos. La imagen de las cosas, de la vida, de las relaciones, en todas partes tiene su pequeño elemento, que se suma a sus vecinos para formar el resultado. Al pisar el mismo "rastrillo" más de una vez, debes completar la construcción y agregar el rompecabezas que falta al panorama general.
El tiempo se las arregla de muchas maneras para estropear la imagen de tu vida, que cuidadosamente recopilaste, volteando una piedra u otra para pulir tu historia ideal, que probablemente ya era impecable para los demás.
Trabajando en nuevos proyectos y dándote cuenta de que la gente sólo ve el panorama general, empiezas a darte un poco de holgura... aunque siempre me consideré un pedante. Es mucho más fácil perfeccionar algo que se puede calcular, que tiene una fórmula… ¿existe tal forma en la vida y en las relaciones? ¿Una persona necesita a una persona? ¿Cuál? ¿Por qué? ¿Debería complementar, ayudar, proteger?
Es elemental resolver una ecuación con una incógnita, pero cuando hay dos, el problema adquiere un sinfín de soluciones. Estás tú + alguien = Algo. Se vuelve más difícil cuando te consideras una constante, contrariamente a las leyes de las matemáticas... Y en general, por mucho que alguien lo intente, es imposible subsumirlo bajo teoremas. Sólo hay un axioma: vivir bien, y vivir bien es aún mejor. ¡Sonríe y que no sea el motivo el que te obligue a hacerlo, sino la persona con su presencia y el conocimiento de que esa persona existe!