Podemos asumir con seguridad que la primavera ha llegado a Murmansk y esto no se debe al clima y la temperatura del aire... El sol, que comienza a abrirse paso a través del cielo velado, es un signo de la tan esperada primavera. Los días se van haciendo más largos y estamos a punto de empezar a olvidarnos de la noche.
No sólo cambian el clima y la naturaleza, sino también las personas... Los trajes son más ligeros y brillantes, así como el estado de ánimo y los deseos de las personas. Generalmente en primavera nacen cosas nuevas... se forman familias y relaciones. Algunas personas tienen gatos y perros, otras se alegran con el nacimiento de un bebé.
Aún así, la primavera es un punto de inflexión, una vez superado, ¡quiero decir que las cosas sólo mejorarán!