Limitaciones y placeres de la ausencia

Limitaciones. La generación de consumidores ya ha dado lugar a una nueva generación que sigue consumiendo más. El tiempo da un nuevo nivel de calidad, de ahí el deseo de más. Algunos toman el ejemplo de la satisfacción y la moda de "nada debe estar prohibido". Cuando todo está permitido con el pretexto de "comprenderse a uno mismo", es un camino corto (directo), pero en absoluto el más rápido. Hay incluso una experiencia práctica asombrosa que demuestra la afirmación.

Decidí tomar otro camino. Desarrollar la capacidad de obtener placer real no del "tener", sino del "no tener". Permítanme ser más específico. De la ausencia, de la exclusión de cualquier necesidad. ¿Por qué? Puedes usar el ascensor y subir al piso 16 en segundos. Beneficio, parece. Ahorra tiempo y esfuerzo. Puedes beber vino caro, de coleccionista. Beneficio en placer, a través de la comodidad de las papilas gustativas. Beber, comer, desplazarse y decenas de otras cosas fisiológicas y cotidianas que se consiguen simplemente con comodidad y placer.

¿Y si te niegas a ti mismo? ¡Cualquier hábito! ¿Está tu poder personal en abundancia? Probablemente lo contrario. ¿Y si la abundancia desaparece, deja de cumplir su función directa, pierde su relevancia física? Estás estresado, te encuentras en un punto de partida bajo para la búsqueda de lo nuevo, lo relevante, lo perfecto. Paralelamente, tienes un estado fundamental de felicidad sin convenciones ni "trucos". Aunque se pierda algo, no lo sientes de ninguna manera. Nada cambia en absoluto. Como en un hermoso día, el sol sigue brillando, pero desde un ángulo diferente.

Fuerza en la libertad frente a lo "necesario", lo "requerido" y todo lo que "debería ser". Por desgracia, hoy en día estamos fuertemente atados y a veces incluso integrados en los porcentajes, guiones y formatos que tenemos en nuestra vida social. Sin embargo, organizar de vez en cuando una desintoxicación completa de esto o aquello sería un gran bombeo de uno mismo.

Fuente