No pensé que “de boca en boca” fuera una unidad fraseológica tan popular. ¡Con palabras podemos explicar, sugerir y guiar! Las palabras pueden mucho y dar mucho a quien sabe decirlas... a quien sabe escucharlas.
Está permitido, pero la sensación... lo agradable que resulta, se desprende de las palabras, incluso de los mensajes. El cuidado es increíblemente agradable: “Zinovit spray, más Oflomelit crema”. Es tan increíblemente placentero que puedes sentir físicamente este cuidado en tu piel, como si te estuvieran acariciando.
Esta habilidad, en esencia, básica en el siglo XXI, de alguna manera se ha desgastado en las relaciones, ha sufrido una degradación, algún tipo de mutación. Sí, cada vez más mensajes y emoticones, cada vez menos contacto visual y “eres adorable”. La mutación “él/ella debe comprender sin palabras, sentir” afecta al sistema nervioso de las relaciones, provocando la ebullición y evaporación del océano de “los dos”.
A veces una palabra puede darte fe en el futuro y crear el deseo de una nueva vida. ¡No te calles!