Edificios típicos: mezquita, iglesia, catedral.

La mezquita # tiene su propio carácter especial. Cuando miro sus escritos, me doy cuenta de lo importantes que son los detalles. Todo lo importante y significativo tiene su propio toque. Algo esencial, pero tan pequeño que el resto quizá no transmita significado.

La iglesia luterana # mostró la máxima mezcla de séquito con notas de hype, cringe y formato hipster. ¡Y es precisamente aquí donde quiero volver por mucho tiempo! Aquí es necesario pasar más de una hora tumbado bajo la luna para impregnarse hasta los topes de la atmósfera.

La grandeza de la Catedral # te sumerge en una especie de nirvana. El ambiente aquí es completamente diferente al resto. Aquí encima de ti hay una convención que quieres aceptar. Un montón de reglas, normas, reglamentos... pero todo es muy rico. Paredes ricas, techos increíblemente hermosos. Incluso el suelo merece una atención especial. Mira-mira-mira. #MeHermosa. Un ministro de la iglesia sonriente me llamó la atención. El joven le susurraba algo al hombre que estaba frente a él y dibujaba una cruz en su frente con un pincel pequeño.

La arquitectura de los edificios sorprende por su complejidad y belleza. La mezquita tiene una fachada muy bonita. ¡Un templo # de belleza completamente diferente! El templo budista provoca una especie de incendio, no... un incendio en su interior. Algo está burbujeando. Algo no tranquilo, pero no alarmante... algún movimiento. Tuve muchísima suerte de acabar accidentalmente en un “servicio” cuando los monjes estaban leyendo una oración. Esto es algo increible Sin entender una palabra y sin siquiera poder distinguir algún sonido para repetir, escuché con extasiado. Sonaba realmente genial. Y sí, definitivamente quiero volver aquí para volver a recibir la misma lectura que los monjes.

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